
Tomás Godoy
@tomas_g.n
SOL
Hoy caminé entre nubes
y fuiste un susurro.
Me volví viento entre los árboles
y el caminar de un extraviado.
La voz del tiempo
fue un arroyo en la montaña
fueron las aves de tu atardecer
y todo lo vivido en este invierno.
Hoy caminé entre nubes
y fuiste un susurro
que recorrió mi cuerpo
como el último estremecimiento.
Todo a tu paso fue vida
y todo tu silencio
la fragilidad de un instante.
Tu generosidad fue reconocer
-en el viento, en sus cambios,
en tu forma de persistir-
el suave calor en mi piel
el latido que sigue las nubes de tu cielo.
RECORDARTE
Vuelvo a lugares que
por última vez visitamos juntos:
bosques, ríos, atardeceres de abismo.
Pequeñas calles en pueblos
perdidos bajo la lluvia.
Camino en silencio
acompañado de un pasado
que voy creando
en instantes de frágil nostalgia.
Casi siento tu mano estrecharse
en las palabras
que no tuve el tiempo de confesarte.
El misterio se me presenta
como canto de grillos
y el susurro de brisas oceánicas.
En este día del fin del mundo
me sentaré tranquilo
en alguna pradera que no me pertenece
y miraré al lago que nos vio juntos
como un espejo de esperanza.
Él me dirá sin atisbo de sorpresa
-La vida es un lento apoderarse
de ciertas cosas:
nuestra esquiva sombra,
recuerdos que se nos escapan tras los sueños,
el calor en solitarias noches de invierno.
VIVIR
es jugar en los contornos
de esa línea de mar y de arena,
abrazo de horizonte
y renovación del cielo.
También en los valles de amistad
y de todo amor posible,
tan inciertos
como cualquier salto en la existencia.
En el umbral del deseo
me encuentro aterrado
por figuras de piedra
y la suave nostalgia
de la desdicha futura
-no quiero para mí tantas desgracias-.
Confieso que me he refugiado en la cobardía,
pero mi escritura es de sangre
y de noches en vela.
Algo me han enseñado mis pérdidas:
no se trata sólo de vivir.
Vivir es atreverse
a caer sobre esa idea de nosotros mismos
y agujerearla de a poco
hasta que esa antigua consistencia
sea la tierra en que crezca
el árbol imprescindible de nuestros sueños.


